Un año más, haciendo visible el poder transformador del arte
Este año 2025 ha sido, para la Fundación, un año intenso de aprendizajes e impacto real. A lo largo de los últimos meses hemos vuelto a comprobar cómo el arte y la cultura pueden convertirse en herramientas poderosas para mejorar el bienestar emocional, reforzar la autoestima, generar vínculos y abrir nuevas miradas, especialmente en contextos de vulnerabilidad.
En total, 168 personas han participado en los diferentes proyectos de la Fundación , compartiendo procesos creativos que han ido mucho más allá del aprendizaje artístico.
Resultados de 2025
Los proyectos desarrollados este año han tenido formatos y contextos diversos, pero todos comparten un mismo hilo conductor: poner a las personas en el centro.
En el proyecto Magistrals , los profesionales han valorado con un 9,2 la adquisición de conocimientos “creemos que trabajar con volumen permite abordar muchos aprendizajes simultáneamente: la tridimensionalidad a la hora de componer la forma y también de pintarlas, el autorretrato…”. Otro testimonio hace hincapié en la libertad creativa: “hemos podido experimentar con formas, texturas e ideas propias, dando vida a piezas únicas. La libertad para expresarnos a través de la arcilla ha sido muy estimulante y motivadora.”
Natura es Cultura ha reunido a 60 participantes entre Barcelona y Girona, provenientes de diversas entidades y centros educativos. Las estancias han sido vividas como una experiencia profunda de conexión con uno mismo, con el entorno y con los demás. Una participante lo resume así: “he conectado conmigo misma, el entorno, otras personas y ha sido una experiencia importante para mí en tema de salud mental y profesional.”
En el proyecto Traspasando el Objetivo , 35 mujeres han participado en procesos de formación fotográfica dentro de centros penitenciarios. A través de la fotografía, muchas han descubierto una nueva forma de mirarse y de mirar el mundo. “Yo no sabía nada, y ahora, muchas cosas. En el futuro me gustaría estudiar fotografía… es un sueño”, explica una de las participantes, poniendo palabras a un proceso de descubrimiento y empoderamiento.
Por su parte, Traspassant Murs ha contado con la participación de 11 jóvenes, que han encontrado en la creación artística un espacio de calma y expresión. “Me quita los problemas de mi cabeza”, dice uno de los participantes, sintetizando el impacto emocional del proyecto .
El impacto de los proyectos no queda en la vivencia puntual. Los datos muestran una clara mejora en la adquisición de conocimientos y competencias artísticas.
Bienestar emocional y autoestima: el impacto más valioso
Uno de los indicadores más relevantes del año es la mejora del bienestar emocional y la autoestima de las personas participantes.
En Natura es Cultura , los participantes valoran con un 8,69 su estado anímico después de la estancia. Un profesional apunta que “la sensación de desconexión y conexión, el compañerismo y las risas han hecho de la experiencia una vivencia enriquecedora.”
En Traspasando el Objetivo , se observa un aumento general de la autoestima . “Este curso me ha ayudado a valorarme mucho más a mí misma”, explica una participante, mientras otra insiste en las ganas de continuar: “Quiero hacer más. Cada día me gusta más.”
En Traspassant Murs , el incremento de la autoestima es especialmente significativo, con una mejora de 1,08 puntos. Los profesionales destacan sensaciones de calma en los talleres y una mejor expresión emocional. “Me he distraído”, dice un participante, poniendo en valor el papel del arte como espacio de respiro.
Crear vínculos y sentirse parte de un grupo
Los espacios compartidos también han favorecido a la cohesión social. En Natura es Cultura , el 100% de los participantes valoran positivamente conocer a personas de otras entidades, y más de la mitad mantienen el contacto una vez finalizada la estancia. “Hemos hecho un grupo muy bonito, espero poder volver el próximo año”, explica una participante. Una educadora añade: “Muchos dijeron que no querían marcharse.”
En Traspasando el Objetivo , se detecta una mejora clara en las relaciones de grupo y una reducción de los conflictos. Las participantes también expresan una mejora en la relación con las compañeras y un mayor interés por conocerse entre ellas.
Aunque en Traspassant Murs no se han consolidado nuevas relaciones estables, sí se ha observado una disminución de los conflictos y una mejor convivencia. “Me ha ayudado a aprender cosas nuevas ya mejorar mi relación con los demás” , resume un participante.
Cuando el arte despierta ganas de continuar
Uno de los resultados más alentadores es ver cómo muchos proyectos tienen continuidad más allá de su duración. En Traspasando el Objetivo , casi el 95% de las participantes expresan la voluntad de seguir aprendiendo fotografía. “Me ha encantado y me gustaría dedicarme a la fotografía”, dice una de las mujeres.
Algunas exparticipantes, una vez en libertad, han contactado con la Fundación para continuar formándose o participar en actividades culturales, e incluso se han incorporado a formaciones externas. Estas trayectorias confirman el impacto a largo plazo de los proyectos.
Sensibilizar y abrir el proyecto a la sociedad
Este año también ha estado marcado por una intensa actividad de sensibilización . Exposiciones, murales, instalaciones artísticas, festivales y jornadas profesionales han permitido compartir con la ciudadanía las voces y creaciones de las personas participantes.
Acciones como exposiciones con cientos de visitantes, murales colectivos o encuentros intergeneracionales han ayudado a romper estigmas ya generar nuevos relatos en torno a la cultura, la salud mental y la inclusión social.
Mirando hacia adelante
Este resumen del 2025 confirma que la cultura no es sólo un derecho, sino también una herramienta de transformación social. Los datos lo avalan, pero sobre todo lo hacen las voces de las personas participantes, que explican cómo el arte les ha ayudado a crecer, a expresarse ya mirar el futuro con mayor confianza.
En 2026 marcará nuevos inicios y nuevos retos. Por primera vez, entraremos en prisión de Mas Enric (Tarragona) con la fotógrafa Meritxell Perpinyà y contaremos con Adriana López Sanfeliu como fotógrafa invitada para impartir una clase magistral. También iniciaremos, por primera vez, una intervención en el CP Ponent : por un lado, daremos continuidad al proyecto Traspasando el objetivo y, por otro, entraremos con Traspassant Murs para pintar un mural con el módulo de Jóvenes bajo la dirección de Tope Rodríguez . Paralelamente, continuaremos trabajando en el CP de Jóvenes con una nueva dirección artística, a cargo de Pep Walls .
Finalmente, en las tierras de Ponent, pondremos en marcha por primera vez el proyecto Natura es Cultura con el artista Jaume Amigó y desarrollaremos una formación sobre la práctica del urban sketching con el ilustrador Lluïsot , dentro del programa Magistrals .
De cara al futuro, la Fundación quiere seguir demostrando cómo la cultura nos salva, replicando los proyectos en más territorios, creando nuevos equipos de trabajo, reforzando alianzas y llegando a más personas, con la convicción de que el arte puede generar bienestar, oportunidades y comunidad.
